Plátano y chocolate es una combinación ganadora. Bien pensado, no se me ocurre ninguna fruta que no se pueda emparejar con un buen chocolate negro, pero en este caso tenemos una unión que siempre triunfa con golosos de todas las edades, como demuestra la receta de hoy.
Las tortitas están preparadas solo con cacao puro en polvo, pero la vainilla y el dulce natural de la fruta las convierten en un bocado delicioso.
Ingredientes
Para 2 personas
- Plátano maduro (unas 2 unidades pesadas sin piel) 170 g
- Huevos 2
- Harina de avena (o copos triturados) 25 g
- Cacao puro en polvo sin azúcar 5 g
- Esencia de vainilla 2 ml
- Canela molida una pizca
- Bicarbonato sódico una pizca (1/8 cucharadita)
- Aceite de coco para engrasar
Cómo hacer tortitas fitness de chocolate, plátano y avena
Dificultad: Media
- Tiempo total 20 m
- Elaboración 5 m
- Cocción 15 m
Pelar los plátanos, quitando los filamentos que se hayan podido quedar adheridos, y cortar en trozos. Cuanto más maduros, más dulces y aromáticas serán las tortitas, pero tampoco queremos que estén mustios. Pesar para comprobar que tenemos unos 165-170 g, aproximadamente.
Colocar los plátanos en una jarra o un recipiente alto, añadir los huevos y batir un poco con un tenedor. Incorporar la vainilla, la canela, el cacao puro el polvo, la harina de avena y la pizca de bicarbonato (aproximadamente 1/8 cucharadita). Batir muy bien con una batidora de brazo tipo minipimer o triturar con un procesador, hasta que no haya grumos.
Calentar a temperatura media una buena sartén antiadherente o plancha y engrasar ligeramente. Echar porciones de masa formando círculos de unos 8-10 cm de ancho. Recomiendo usar una jarra para echar la masa suavemente, dejando que las porciones se formen solas. No es aconsejable hacerlas muy grandes porque será más difícil darles la vuelta.
Esperar a que salgan unas cuantas burbujas antes de voltear cada tortita con una buena espátula antiadherente y fina. Cocinar 1-2 minutos más por el otro lado y retirar. Continuar hasta terminar con toda la masa, removiendo bien la jarra antes de seguir.