La hipoxia intermitente es una técnica de entrenamiento aplicada a deportistas con el objetivo de mejorar el transporte de oxígeno, y en el rendimiento deportivo, aunque tiene muchos más beneficios tanto en la salud como el rendimiento.

La hipoxia intermitente es una novedosa, potente y eficaz herramienta para el entrenamiento en altitud, y se afianzándose progresivamente en el campo deportivo así como en la salud. El éxito de la técnica radica en el control fácil para adecuar las cargas de la hipoxia a cada individuo, sacando así el mayor rendimiento al entrenamiento. Los protocolos se ajustan a cada uno de los deportistas en la función de su adaptación, con los mismos principios que en el entrenamiento habitual, mientras que la carga de la carga es mayor.

Numerosos estudios han demostrado que el entrenamiento en la altitud provoca respuestas fisiológicas beneficiosas, pero la dificultad para el entrenamiento con una disponibilidad de oxígeno propio del nivel del mar puede causar un desentrenamiento que tiende a anular estas ventajas. El entrenamiento en la altura y baja altitud.

BENEFICIOS. El entrenamiento en altitud ha sido utilizado para mejorar el rendimiento atlético durante las décadas. Desde los Juegos Olímpicos de México, donde se constataron los efectos de la altura en el rendimiento por primera vez, muchos equipos e individuos han estado capacitados en la actividad como una parte de su preparación.

El entrenamiento hipóxico permite a los deportistas tener acceso a esta poderosa tecnología evitando los gastos y los inconvenientes de viajar a lugares de altitud real.

Las diferentes modalidades de exposición a la hipoxia provocan diferentes mecanismos de adaptación y mejoras en diferentes parámetros relacionados con el rendimiento deportivo. Numerosas investigaciones utilizan sistemas de entrenamiento en altitud simulada han mejorado una mejora en el rendimiento a nivel del mar después de un período de exposición y entrenamiento en hipoxia y deportistas de alto nivel.

Aunque todavía estamos investigando los mecanismos, hemos podido demostrar una mejora en la entrega y el uso de oxígeno a nivel mecánico y celular, así como una mejora en la capacidad de amortiguación. La mayor parte de los beneficios inmediatos en el rendimiento deportivo implica una mejora cualitativa de los sistemas fisiológicos relacionados con el suministro de oxígeno y la utilización de la energía.

Las principales ventajas del entrenamiento hipóxico son:

  • Eficiencia en el tiempo. Nuestro organismo trabaja más duro en un ambiente hipóxico, lo que proporciona un alto estímulo de entrenamiento en un menor espacio de tiempo.
  • Mejoras en el rendimiento. Mediante una adecuada integración de entrenamiento hipóxico en la preparación de un deportista las mejoras que se han podido constatar son entre otras:
  • Mejoras en los parámetros hematológicos.
  • Aumento de la resistencia y del tiempo hasta el agotamiento.
  • Aumento de la potencia.
  • Mejora de la capacidad anaeróbica.
  • Adaptaciones positivas a nivel celular.
  • Reducción de la fatiga.
  • Pre-aclimatación previa a una competición en altitud.
  • Reducción en la carga de entrenamiento. El entrenamiento hipóxico puede ser eficaz a la hora de mantener la condición cardiovascular, mientras que reducir la carga mecánica. El estímulo fisiológico Causado por la hipoxia es Altamente Efectivo INCLUIDO con bajas cargas de Trabajo Lo Que Realmente es Útil en periodos en Los Que el deportista atraviesa ONU PERIODO DE Lesión de de Recuperación permitiendo la Vuelta a la Competición En un menor espacio de Tiempo.
  • Aumento del metabolismo de las grasas como sustrato energético.  Las últimas investigaciones se atribuyen al entrenamiento hipóxico un efecto impulsor de la oxidación de las grasas que se mantiene activada en las horas posteriores a la finalización del ejercicio. Otro factor relacionado y que puede tener un efecto adicional es la supresión del apetito que se puede ver en varios estudios. El entrenamiento hipóxico supone una valiosa estrategia aplicable en el campo de la salud en el tratamiento de patologías como la obesidad y la resistencia a la insulina.

MÉTODOS .  El oxígeno es un buen preciado que nuestro organismo necesita para producir energía aeróbica y poder realizar el ejercicio o recuperar el mismo. A medida que vamos a ascender y ganar la altura, la disponibilidad de oxígeno decrece ya su vez nuestra capacidad para mantener una intensidad notable de ejercicio de manera notable.

Los cambios que se producen en nuestro organismo son muy relevantes también sobre el sobrepasar los 1500m de altitud.

En el campo del rendimiento deportivo o de la salud.

Dormir en hipoxia.  El uso de una cámara o habitación hipóxica puede ser simular en su interior una altitud determinada para poder habitar o mantener un número determinado de horas diarias. Es lo que se denomina “Live High” (LH) o “Vivir Alto”. El objetivo de esta práctica es la de aumentar la capacidad aeróbica mediante el aumento de la hemoglobina, una célula que se encuentra en la sangre y que se encarga de transportar el oxígeno. Al aumentar el número de células transportadoras de oxígeno, aumenta la disponibilidad de oxígeno para los músculos de esta manera.

Ejercicio en hipoxia (IHT).  Generalmente se denomina Tren Alto (TH) o “Entrenar Alto”. Consiste en llevar a cabo sesiones de entrenamiento en hipoxia utilizando equipos específicos. En este caso, el tiempo de exposición es limitado e insuficiente para lograr cambios en la relación con la hemoglobina. Por el contrario, el estrés que el organismo se ha convertido en un ejercicio con una baja disponibilidad de los medios de comunicación en la configuración celular del músculo volviéndolo más eficiente en la captación y en la utilización del oxígeno facilitando la conversión de energía en el trabajo muscular.

Podemos diferenciar las diferentes formas de ejercicio en la hipoxia en función de la intensidad, la duración y la altitud. En esta categoría encontramos:

  • IHT (Entrenamiento Hipoxico Intermitente) o Entrenamiento interválico en hipoxia.
  • CHT (Entrenamiento Hipoxico Continuo) o Entrenamiento contínuo en hipoxia.
  • RSTH (Entrenamiento de Sprint repetido en Hipoxia) o Entrenamiento de repetición de sprints en Hipoxia.

Exposición intermitente a la hipoxia (IHE).  Esta modalidad lleva un cabo en reposo o de manera pasiva. Consiste en la alternancia de periodos hipóxicos de corta duración con periodos de recuperación en normóxia o hiperoxia (alta disponibilidad de oxígeno).

La IHE actúa sobre la regulación de la respiración, facilitando un mejor intercambio de gases en los pulmones y los cambios en el sistema nervioso autónomo. También funcionó a nivel mitocondrial como resultado de un uso optimizado del oxígeno en la producción de energía. Además, la exposición a niveles bajos de oxígeno mejora la defensa antioxidante del organismo.

Hay muchas evidencias que muestran que la IHE es también un método eficaz en el tratamiento de diversas patologías como el asma, ciertas enfermedades neurológicas, y la obesidad entre otras.