Las recetas con calabaza son un básico del menú familiar en casa: es sabor dulzón de esta hortaliza conquista los paladares más exigentes, y se presta a combinaciones deliciosas, tanto saladas como dulces. ¿Quién puede resistirse a una crema de calabaza? ¿O a un trozo de bizcocho de calabaza en el desayuno? Las recetas con calabazas se pueden preparar al horno, cocidas, a la plancha, salteadas, al vapor, fritas… además la calabaza es un fruto que se encuentra en invierno y verano, todo un lujo.
Como si su exquisito sabor no bastara, hay otro motivo fundamental para preparar recetas de calabaza: esta hortaliza tiene pocas calorías porque está compuesta en su mayor parte por agua; además tiene un bajo aporte de hidratos de carbono y mucha fibra, por lo que es ideal para mantener un buen tránsito intestinal. Además la calabaza es rica en beta-caroteno o pro-vitamina A y vitamina C; aporta también vitamina E, folatos y vitaminas del grupo B, y minerales como fósforo y el magnesio.
5 Recetas de calabaza al horno
Las recetas con calabaza al horno son mis preferidas… la calabaza queda sabrosa, es saludable y se puede condimentar de muchos modos.
Calabaza al horno con miel y queso feta
¿Qué os parece esta calabaza asada con miel y queso feta? ¡A mí se me hace agua la boca! La receta es muy sencilla: pelamos la calabaza, eliminamos las pepas y la cortamos en cubitos; los ponemos en una fuente forrada con papel para horno, rociamos con aceite y horneamos por 20 minutos a 200°C (horno precalentado). Retiramos, espolvoreamos con semillas de sésamo y horneamos 10 minutos más, o hasta que la calabaza esté cocida. Retiramos y condimentamos con una mezcla de miel y aceto balsámico (3 cucharadas de miel y 1 de aceto balsámico para aprox 600 g de calabaza cruda), salamos, agregamos queso feta cortado pequeño, mezclamos ¡y a disfrutar!
Bastoncitos de calabaza al horno
Hemos visto en nuestras primeras recetas con calabaza unos bastoncitos de calabaza frita; esta variante tiene la misma pinta y están muy rica, ¡pero están hechos al horno! En este caso cortamos la calabaza en bastoncitos; preparamos un condimento con aceite, media cucharadita de canela, sal y ajo en polvo (a gusto). Condimentamos con esta mezcla los bastoncitos girándolos para que queden bien cubiertos de condimento, los distribuimos en una bandeja con papel de horno y horneamos a 180°C (horno precalentado) por unos 15 minutos, hasta que estén tiernos, luego subimos la temperatura a 200°C y doramos por 3 minutos. Si vuestro horno tiene la función grill, ponéis la bandeja bien alta para que se doren.
Calabaza al horno
La calabaza al horno es una opción sencilla y sabrosa, sobre todo si le damos un toque extra de sabor con nata y queso parmesano. Lavamos la calabaza y la cortamos en gajos, la ponemos sobre un fuente de horno con la cáscara hacia abajo y la condimentamos con una mezcla de nata de cocina, hierbas aromáticas y sal. Llevamos al horno a 200°C por 40 minutos, retiramos, espolvoreamos con queso parmesano y volvemos a poner en el horno hasta que la calabaza esté tierna y el queso gratinado.
Pastel de carne y calabaza
¿Os gusta el pastel de carne con verduras? Pues en este caso lo prepararemos usando calabaza.
Ingredientes: 1 kg de carne picada de ternera; 500 g de calabaza limpia (sin cáscara ni pipas); 4 lonchas de queso; 1 huevo; 2 cucharadas de pan rallado; 100 g de queso en polvo (por ejemplo parmesano); 180 g de patatas; sal y pimienta; aceite de oliva virgen extra
Preparación: cocer las patatas y hacerlas puré. Cortar la calabaza en trozos grandes; calentar 2 cucharadas de aceite en una sartén y cocer en él la calabaza, a fuego vivo, hasta que esté tierna para poder pisarla con un tenedor. Eliminar el agua del puré de calabaza con un colador.
En un cuenco grande unir la carne, el huevo, el puré de patata, el pan rallado, sal y pimienta. Si hace falta podéis agregar más pan rallado, sin exagerar para que el pastel no quede seco. Extender una hoja de papel para hornear y distribuir encima la carne, formando un rectángulo. En centro del rectángolo distribuir el puré de calabaza y las lonchas de queso. Enrollar con la ayuda del papel de hornear, cerrar el paquete como si fuera un caramelo. Dejar reposar en la nevera algunas horas y luego hornear en horno precalentado a 180°C por 40 minutos.
Dejar templar antes de cortar. Se puede preparar con antelación, cortarlo y calentar las rebanadas antes de servir.
Chips de calabaza
Podemos preparar un snack saludable, simplemente cortando calabaza, patatas y remolachas con una mandolina, para que nos queden bien finos. Los distribuimos en una fuente forrada con papel de horno (una verdura a la vez porque tienen diferentes tiempos de cocción), y los horneamos en el horno a 220° por unos 20 minutos, hasta que estén crujientes.