Si eres una persona sana, mal no te va hacer andar 10.000 pasos al día por lo menos, pero los estudios científicos animan a centrarte en el caso particular de cada individuo y sus condiciones de peso, salud, edad, y evitar prescripciones generalistas que impliquen que lo que puede ser bueno para algunos pudiera ser pernicioso para otros. Por ejemplo, un estudio publicado en JAMA Internal Medicine con 18.000 mujeres con mujeres mayores de 72 años en EEUU muestra que la cifra saludable para que estas señoras alargaran su vida sería mucho menor, les bastaría con 4.400 pasos al día, su riesgo de muerte se reducía nada menos que un 41% sin tener que llegar a los 10.000 pasos.

Si bien las mujeres que andaban alrededor de 2.700 pasos al día tenían mayor riesgo de muerte prematura que aquellas que realizaban caminatas de al menos 4.400 pasos, esta protección se iba incrementando hasta alrededor de 7,500, a más pasos andados menor riesgo de muerte en este grupo de edad, pero por encima de los 7,500 la protección que se conseguía no era demasiado relevante. Así que podemos fijar la franja entre los 4.400 y los 7,500 pasos al día como la media de pasos saludables para las mujeres a partir de los 72 años.

Como bien comenta uno de lo autores del estudio, el profesor de Epidemiología I-Min Lee, los pasos son una buena vara de medida para mostrar el nivel de sendentarismo de una persona y cómo este afecta a sus valores de glucosa e insulina en sangre, presión arterial e inflamación, a mayor actividad estos parámetros se encuentran en condiciones más óptimas para evitar enfermedades cardiacas y/o cáncer.

¿QUÉ OCURRE CON LAS PERSONAS JÓVENES? PUES QUE CON 10.000 PASOS TE QUEDAS CORTO…

Otro estudio desarrollado por Herman Potzner de la Universidad de Duke con los carteros de la ciudad de Glasgow mostraba como era a partir de 15.000 pasos al día cuando la actividad del día a día comenzaba a proteger de enfermedades y muerte prematura.

Para este doctor la historia evolutiva del ser humano se ha basado en una actividad tan elevada para su supervivencia que reducir la actividad del hombre actual a una media de 10.000 pasos al día no sería suficiente para garantizar su salud. Tendríamos que andar alrededor de 2 horas y media por día para poder hablar de estar desarrollando una actividad que nos proteja realmente de los males del sendentarismo en la vida moderna como enfermedades cardiacas o diabetes tipo II.

150 MINUTOS A LA SEMANA NO SIRVEN PARA CUIDARTE

Así Potzner también es muy crítico con la prescipción de que bastaría con solo 150 minutos de actividad física cardiovascular a la semana que podrías distribuir entre andar, correr, nadar o montar en bici. Esos 150 minutos a la semana no equivaldrían a más de 2.500 pasos al día, cifra más que insuficiente para los parámetros de protección que baraja Potzner que no empezarían hasta las 2 horas y media de actividad aeróbica por día.